domingo, 27 de diciembre de 2009

La última caza del señor Kírkiriv


Es 17 de diciembre, martes, llueve, son las 3:30 de la mañana y el señor Kírkiriv está esperando a su última presa.

El señor Kírkiriv es muy meticuloso, nunca nadie supo nada de sus actos. Sólo lo sabe su mano derecha, el señor Carsley. El señor Kírkiriv lleva exactamente 161 días asesinando semanalmente y aleatoriamente a uno de sus (originalmente) 1152 empleados de su empresa. Sus motivos no son muy claros ¿Aburrimiento? Quizás, ¿Locura? Seguramente, ¿Ajuste de personal? Tentador. ¿Entonces qué?, ¿Acaso importa?

Bueno lo importante es que mi jefe, el señor Kírkiriv me espera bajo la lluvia en su discreto audi negro y yo estoy en mi casa mirándolo desde la ventana. No sé cómo sabe que me he quedado sin insulina. No sé como sabe que soy diabético. No sé como sabe que si no salgo a buscar insulina me muero. No tengo ni idea, sólo sé que el señor Kírkiriv me espera, sé que el señor Kírkiriv tiene ganas de marcha, sé que puede ser mi última noche. Después de un par de minutos, decido salir de casa.

La lluvia se intensifica, la calle está vacía (como de costumbre), ignoro al audi negro, miro al suelo y sigo. Entonces, de repente, como un puñal que me atraviesa el oído escucho la fría y meticulosa voz del señor Kírkiriv el cual me hablaba desde el coche.

-Señor B.Rodriguez, ¿Podría hacerme el favor de acompañarme?
-Claro señor Kírkiriv.- Respondo con la máxima naturalidad que me organismo me permite.

Subo al espacioso coche, no había nadie más, sólo él, con su habitual traje gris oscuro y su habitual corbata azul marino.

- Buenas noches señor B.Rodriguez, ¿Sabe por qué está aqui?.
- No señor- Trago saliva- No señor, no lo sé.
- ¿Seguro? Según el señor Carsley usted lo sabe.
- ¿Saber el qué, señor?.
- No me tomes el pelo señor B.Rodriguez, sabes lo que hago y sabes que tú eres el siguiente.- Su voz poco a poco se ponía más fría, aunque parecía disfrutar el momento cual niño disfruta su caramelo.
- No le entiendo señor, solo iba a buscar insulina, soy diabético ¿Sabe?- Mi voz temblaba, faltaba poco.
- Por supuesto, yo mismo en persona me encargué de que se quede sin insulina esta misma noche. Usted no puede mentirme señor B.Rodriguez, por última vez, ¿Quién se lo ha dicho?- El señor Kírkiriv parece irritado, desenfunda su magnum plateada y me la apunta a la sien, me quedo paralizado.
- ¡No lo sé!- Grito desesperadamente.
- Bueno en ese caso- Quita el seguro y prepara el gatillo.-¿¡Quién se lo ha dicho!?.

Se escucha un disparo, tengo un fuerte pitido en el oído, se me escapan unas lágrimas. El cadáver del señor Kírkiriv yace al lado mío. ¿Qué había pasado?.

Al cabo de un minuto se abre la puerta del coche, es el señor Carsley, la mano derecha del señor Kírkiriv, me mira sonriente.

-Buenas noches señor B.Rodriguez, gracias por hacer de señuelo, deje que me encargue de este desastre.- Dice con una escalofriante tranquilidad.

Aun en estado de shock salgo sin decir nada. Él señor Carsley me dedica una leve sonrisa y se marcha tan discretamente como lo hace en las reuniones, dejándome sólo en medio del diluvio de aquella terrible madrugada.

La última noche caza del señor Kírkiriv había concluído. ¿Qué motivos tendría? ¿Sentido de la justicia? Quizás, ¿Herencia de la empresa? Seguramente, ¿Ajuste de personal? Tentador. ¿Entonces qué?, sigo vivo. ¿Acaso importa?.

Disculpadme, tengo prisa, he de ir a la farmacia.

lunes, 21 de diciembre de 2009

Felices fiestas!

Ya que estamos en fiestas aprovecho este momento para agradecer y celebrar las....


¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡335 VISITAS!!!!!!!!!!!!!!!
(aunque seguramente más de la mitad de ellas son mías)

¿Para qué celebrar números redondos como 100, 1000, o 100000, cuando tenemos números igual de honrosos como 98, 137 o 335?. 335 motivos para concluír el año y comenzar el 2010 con los mejores ánimos y las mejores blogfemias.

Aprovecho que se aproxima la navidad para desearos felices fiestas y un gran año 2010 que nos espera, de verdad gracias a los cuatro matados que me siguen más o menos regularmente.

Hay que vivir el 2010 y mucho, hay que cumplir nuestros deseos y hay que olvidarnos de las tonterías que nos afectan día a día. Que lo paséis muy bien que el mundo se acaba, literalmente, en el 2012, según los mayas y unas cuantas sectas suicidas muy verídicas y convincentes (más información en calle catalans).

Bueno me apetecía y he aquí la última (o eso creo) blogfemia del 2009, nos vemos en la decada siguiente.

Feliz año blogfómanos! Un abrazo.