miércoles, 29 de septiembre de 2010

Futuro



Me acaban de confirmar de que entro en la tercera opción en mi preinscripción:

Grado en humanidades: Estudios interculturales



Más allá de que sea la tercera opción que elegí en una preinscripción donde la oferta universitaria era ínfima...

Más allá de que sea una carrera con muy pocas salidas...

Más allá de que sea en la UJI de CASTELLÓN...

Más allá de que ni yo sé de que va...

Más allá de todo eso:



Os cagué.

Iré a clases. Si me gusta, bien. Sino a la mierda. Por fin acabé el colegio. Tendré mucho tiempo, mucho tiempo que será invertido en estos BLOGS. Este será el año.

LLegó el momento. Cantemos todos juntos:


viernes, 24 de septiembre de 2010

Bachiller, selectivo y... ¿caca?

En pocos días o pocas horas salen las listas definitivas de la universidad, es ahí cuando sabré a qué mierda de carrera entraré.

Esta es la historia:

Resulta que ya he acabado el bachillerato de lo más normalmente con una nota mierda, digo nota media de 6.

El primer año (que es donde hay que conseguir la media más alta) me metí en la rama de ciencias sociales (matemáticas y económicas) por las "salidas laborales" y no por mis gustos propios, un error. Resultado: me lo pasé a medias, es decir, fue un desastre. Faltaba demasiado a clase y creo que no estudié casi nada. Conclusión: media 5,8 y una asignatura pendiente.

En segundo me cambié de modalidad, a humanidades (Latín, historia del arte). El año fue el mejor, es donde más relacion entablé con mis compañeros, donde fui casi siempre a clase y donde me esforcé algo más (sólo un poco). Pero (siempre hay un pero) segundo es segundo, y fue el año más exigente. Conclusión: Media final 6,2 pero con dos asignaturas para septiembre.

Resumen de bachillerato: 6, sin esforzarme nada. Todo y todo es consecuencia de mis actos y de mi olgazanería.

Ahora bien, verano estudiando para el selectivo (sin matarme), convencido de que, según cualquier docente en funciones, se reservaban un 10% de las plazas para los pringados, tontos o vagos de septiembre. Nada más lejos de la realidad.

Hice el selectivo, lo hice (como no) de la manera más normal y corriente (media de 8,3 sobre 14). Consciente de que sería provable de no entrar en la carrera que quería me dirigí a la preinscripción. Lo que no sabía era que sería literalmente imposible entrar en casi cualquiera.

Llega la preinscripción, reencuentro con los otros tontos, pringados o vagos de septiembre; y por fin me toca el turno de hacer, junto a la coordinadora de bachiller de mi colegio, la preinscripción cía internet. Después de rellenar el formulario de turnocon todos los datos personales se me despliega las carreras que puedo elegir.

Yo, que me había quedado en el ordenador hasta tarde eligiendo cuidadosamente qué carreras elegir, me entraron ganas de llorar. Fue tal la indignación, que, tras mirar la lista de arriba a abajo por lo menos cinco veces, estuve a punto de levantarme y marcharme sin preinscribirme en nada. Estas eran las famosas carreras que aun le quedaban plazas estadísticamente hablando:

-Un 70% de las carreras eran científico-técnicas.

-Del 30% de las demás (que eran más o menos de mi rama social-humanística) el 20% se encontraba en la Universidad de Miguel Hernandez o en la Universidad de Alicante (Muy lejos teniendo en cuenta que sus facultades no sólo se encuentran en alicante sino también en pueblos como Elche, Altea u Orihuela)

-En conclusión, sólo había un 10% de la lista de carreras en la Comunidad Valenciana disponibles dentro de mis posibilidades. Teniendo en cuenta que un 3% pertenecía a universidades privadas o a plazas exclusivas para deportistas de élite, mi porcentaje de elección se situaba en un 7%.

Yo sabía que mis posibilidades de elección iban a ser bastante más reducidas que las de mis compañeros de junio, pero no sabía que la supuesta libertad de elección se quedaba en eso, en supuesta.

Al final me tuve que conformar eligiendo las siguientes mierdas, digo carreras:

1- Mierdas modernas, digo LENGUAS modernas. VALENCIA.
2-Historia del arte. VALENCIA.
3-Grado en humanidades: estudios interPENE-ANALES, digo interculturales. CASTELLÓN.
4-Estudios ingleses (4.5 en inglés en el selectivo). CASTELLÓN.
5-Relaciones laborales y recursos humanos. CASTELLÓN.

Al salir de la indigna preinscripción, me enteré de que esto es así porque hubo dos (como de costumbre) subastas de notas. En estas subastas, se reparten las plazas vacantes que sobran a gente interesada en entrar pero que no le llega la nota por poco. Estas son en junio y septiembre. Pero lo que ocurrió es que la de septiembre se hizo sin la gente de septiembre. Conclusión: Los de septiembre, por vagos, tontos y pringados, nos quedamos con las migajas, es decir, con las carreras donde nade se quiere meter. Terrible teniendo en cuenta que tampoco tenemos derecho a meternos en lista de espera para entrar en otra carrera.

En mi caso, por lo menos, que no tengo muy claro lo que quiero hacer con mi vida, este año me vendrá de perlas, pues tendré un año "sabático" para pensar y pasarlo bien y culturizarme. Tuve suerte. Pero hay otros, como los que quieren entrar en psicología desde la rama de sociales, que no podrán entrar nunca más puesto que no sólo no hay plazas en septiembre, sino que no podrán hacerlo el año que viene debido a que, a partir del año que viene, sólo aquel que tenga bachillerato de ciencias podrá presentarse a psicología.

En conclusión, no sé si será solamente así este año o si será igual para siempre a partir de ahora, pero recomiendo y reitero que nadie cometa mi error. No os confiéis, estudiad un poco y no seáis pringados tontos o vagos. Que merecerá la pena igualmente. No hay nada como la libertad a la hora de elegir. Si vas a septiembre tendrás la misma libertad que el más lineal de los juegos arcade.

Hacedme caso, esforzáos...
Y el selectivo es una chorrada.


--ACTUALIZADO--

Resulta que este año es el último año del selectivo de septiembre. A partir de ahora, los que tengan asignaturas pendientes, tendrán que hacer el selecctivo en Julio.
Sin duda alguna, qué mala suerte tenemos los del 92.

jueves, 23 de septiembre de 2010

Hoy recomiendo: Maus


No me acuerdo exactamente porque adquirí esta obra maestra, no sé si fue por recomendaciones, ganas de leer una novela gráfica o la inercia de haberme comprado otra obra maestra (El Eternauta) o por todo esto junto. A mi nunca me atrajeron demasiado las historias de holocaustos y judíos, siempre me parecieron más una muestra de justificación por parte de los judíos de sus hostilidades hacia medio-oriente que una muestra de la triste realidad que pasaron. Nunca me fueron demasiado creíbles estas historias.

"Maus. Relato de un superviviente" (Maus: A Survivor's Tale). Publicada en dos partes (1986 y 1991) es una novela gráfica escrita por el estadounidense de origen judío Art Spiegelman. Es la única novela gráfica, comic o historieta que ha ganado un premio Pulitzer.


La novela Maus comprende dos historias intercaladas: La primera, la vida de Art Spielgelman (el autor) y la relación con Vladek Spielgelman (su padre) cuando éste decide hacer la obra. La segunda, La vida de Vladek durante la segunda guerra mundial y el holocausto. Toda la obra, si bien desde puntos diferentes, gira alrededor de la figura de Vladek Spielgelman. Es el mismo Vladek quien, ya de mayor, cuenta a su hijo sus vivencias en la segunda guerra mundial y en el holocausto y es el mismo Vladek, de joven, quien las vive en la otra parte de la obra. Observamos un cambio drástico en la psicología del Vladek joven al anciano debido a las terribles experiencias suyas en aquella época. Cada vivencia se verá reflejada en la peculiar forma de ser del viejo Vladek.

Uno de los aspectos más peculiares de Maus consiste en su representación gráfica. El trazo es rápido y nervioso, casi surrealista pero lo más peculiar es la caracterización de los personajes en animales. En la obra los judíos son ratas, los alemanes son gatos, los polacos son cerdos, los americanos son perros, los suecos son ciervos e incluso los ingleses son peces. Esta caracterización, en cuanto a los judíos como ratas y a los alemanes como gatos, no es más que una metáfora de lo que fue Polonia: una ratonera. De Polonia surgieron el mayor porcentajes de judíos hacia los campos de concentración nazis. De hecho la primera parte de la historia es una continua persecución entre felinos y roedores donde estos últimos son más pequeños y tienen todas las de perder.

A pesar de este tono desenfadado de dibujo, Maus, es, en mi opinión, la obra más realista de entre todas las ficciones de este oscuro género. Quizás lo que hace esto tan realista sería la "frescura" de los hechos que nos da el señor Vladek Spielgelman así como su trepidante historia y su entrañable forma de ser. El señor Vladek Spielgelman no se limita a contarle su historia a su hijo dibujante Artie, si no que parece revivirlas el mismo. Esto en una novela gráfica es muy dificil de conseguir y en este aspecto Artie Spielgelman se ha lucido. Con ello la ambientación, el modo de vida (no sólo en tiempos crisis sino también en tiempos prósperos del pueblo judío) y la psicología de los personajes se nos presentan descritos con un realismo soberbio casi inéditos en este formato.

Todas estas historias (La guerra, Auschwitz...) se van complementando con la vida interna del autor, sus miedos, sus problemas y traumas como el suicidio de su madre Anya o la presión de hacer la segunda parte tras el éxito de la primera. Esto hace que la historia amplíe sus alternativas y nos de un mejor conocimiento de la vida del autor, que no tiene ningún problema en mostrarnos su lado más personal y profundo.

Con un aire desenfadado, un perfecto equilibrio entre risas y llanto, un realismo superlativo, una profunda metáfora, una descripción psicológica perfecta (el padre), sumando a detalles sutiles y puntos de gran ironía en momentos tan trágicos donde el humor parece inalcanzable, esta obra es de lo mejor que hay en cuanto a novelas gráficas y de las más completas del género. Un amigo me dijo, así mas o menos, que El Pianista tiene muchísimo de Maus. Cuando la leí me di cuenta que no sólo el pianista, sino que todas, TODAS las grandes obras del género tienen a Maus como uno de sus principales referentes.

Por último hay que destacar la reseña que hace Umberto Eco hacia Maus:

"La verdad es que Maus es un libro que uno no puede dejar, ni siquiera para dormir. Cuando dos de los ratones hablan de amor, te conmueve; cuando sufren, lloras. Poco a poco, a través de este relato compuesto de sufrimiento, humor y los desafíos cotidianos de la vida, uno queda atrapado por el lenguaje de una antigua familia del este de Europa, y es arrastrado por su ritmo suave e hipnotizador. Y cuando uno acaba Maus, se siente triste por haber abandonado ese mundo mágico..."

En conclusión, recomiendo Maus a todo ser con capacidad de abrir un libro. Una historia tan entrañable como apasionante que tiene grandísimos detalles. Toda una obra maestra.

Muchas gracias.

miércoles, 22 de septiembre de 2010

BLOGSODIAS

Buenas mis queridos lectores.

Queda anunciado que va a haber un cambio grande en este blog.

De ahora en más este blog se dedicará a las reflexiones, artículos de opinión...etc. En cuanto a las ficciones (relatos, microrrelatos, Tardalona universe...) serán trasladadas a un blog gemelo de BLOGFEMIAS:

BLOGSODIAS

Dividiendo realidad y ficción, que ojo, no siempre se encuentran distanciadas, ahora podemos obtener una visión más global de todo el asunto. Las ficciones y las reflexiones podrán estar relacionadas entre sí y quizá, alguna vez, puede que hasta una trate de la otra, es decir, complementando la reflexión con una ficción o viceversa.

Se intentará seguir una dinámica homogénea trabajando mucho más regularmente y se intentará no abandonar más a un blog que al otro, que, al fin y al cabo, usando caminos diferentes, el objetivo personal es el mismo: Que la gente disfrute.

Bueno, queda agradecer al millar de personas que visitaron Blogfemias y espero que esto siga creciendo más, más y más. Eso, gracias a todos y prometo volver con más blasfemias y rapsodias. Mentira: prometo volver con más BLOGFEMIAS Y BLOGSODIAS.

BLOGSODIAS
BLOGSODIAS
BLOGSODIAS
BLOGSODIAS

viernes, 10 de septiembre de 2010

Reflexión entre el selectivo

El peor enemigo…



¿Quién o qué es tu peor enemigo? Si lo pensamos ¿Es el peor enemigo el que te impide lograr tus objetivos o logros, tu antítesis? ¿O sería el que ejerciese de peor manera su papel de enemigo? en ese caso sería mi mejor amigo, ¿Por qué no? o más radical ¿No es la causa de tu existencia?. Yo creo que batman no sería batman sin el Joker, no creo que Superman sería Superman sin Lex Luthor. Todos y cada uno de estos ejemplos, aunque sean ficticios, nos dejan claro una cosa: No somos los mismos sin nuestros peores enemigos.

Muy bonito, pero ¿En la realidad existe el peor enemigo? ¿Tengo yo algún peor enemigo?… Creo que le puedo caer mal a alguien o puede que no me lleve nada bien con otro pero esto queda ahí, seguimos sin enemigos y menos sin peores enemigos.

Después de un tedioso día de exámenes me he dado cuenta que no hay peor enemigo que uno mismo, somos tanto capaces de lo mejor como de lo peor. Soy capaz de la máxima fluidez de ideas como del mas férreo bloqueo de mi pensamiento. Somos el origen de casi la mayoría de nuestros males como también somos el origen de casi todos los milagros que nos ocurren, por mínimos que sean.

Pero de estos males y de estas bendiciones, al igual que Batman con el joker o Superman con Lex, su existencia dependen una de la otra. Nunca valoraremos una bendición de la vida si nunca hemos tenido un momento malo. No es que Batman no sería el mismo sin el Joker, resulta que Batman es el Joker. Superman es Lex Luthor. El Barça es el Madrid. Antes hablaba de dualismo, ahora digo unidad. Mi mejor amigo es mi peor enemigo. Y ambos sólo pueden ser una persona.

Yo.

¿Tú?
Otro.