Un susurro al oído
o una melodía de clarinete
reactiva el control de mis sentidos
en un final feliz entre la humedad y lo perenne,
la fresca brisa y esas gotitas de rocío.
Noto el polen que pulula entre mis silbidos,
y lentamente cierro los ojos,
entonces siento los últimos rayos de sol
calentar los finales latidos
de este cuerpo que entre las flores
solo y feliz se ha perdido.
No hay comentarios:
Publicar un comentario