Imaginemos una sala blanca. Es cuadrada y la ubicación y la finalidad de la casa carecen de explicación. Sólo es destacable que es una habitación blanca de más o menos treinta metros cuadrados. En ella no hay ventanas ni puertas, sólo hay un grifo que proporciona agua y un retrete, además de un cuchillo. Todo blanco.
Hay siete personas: Una madre y su hijo, una señora mayor, un africano que no entiende nada de español, el presidente de los EEUU (Que tampoco entiende nada e español), un asesino en serie y un policía barrigudo y bonachón que le tenía esposado. La madre y el niño se encuentran en una esquina, el policía y el asesino en otra, y el africano en otra y el presiente en la última. La señora se encontraba dormida en el centro. Estaba a punto de despertarse, se notaba.
En una esquina.
-Mami, ¿Dónde estamos?- Pregunta el niño con los ojos rojos, llevaba media hora llorando.
-Mira Nacho, ¡Te he dicho que no lo sé!- Estresada, buscando alguna distracción, se fijó en el reloj de su pulsera. El reloj seguía parado, llevaba la misma hora desde que apareció en ese lugar.
En otra esquina.
-Mire, ¿Ve? hay un cuchillo, no nos podemos fíar de los demás, tienes ue cogerlo. Tiene que haber alguien que tome el control de la situación, y sólo lo podremos conseguir con el cuchillo. ¿Qué quieres, que lo coja ese negro de mierda incivilizado y nos mate a todos? Quizás es un puto guerrillero.-Comentó el psicópata al guardia.
-¡Oh sí, cojo el cuchillo y te lo doy!, ¡Mátame!, ¿No? ¿Tú crees ue soy tonto? ¿Que voy a acercar un cuchillo extremadamente afilado, un arma blanca, a un psicópata que se cargó a trece personas sin piedad, incluído a tres niños? Haz el favor de cállarte. Seguro que no estaremos aquí mucho más tiempo.
-¿Y que es lo que le hace pensar eso? Sólo por curiosidad. ¿No ve que estamos encerrados en un lugar donde ni siquiera nosotros sabemos dónde está ni cómo llegamos? ¡¿No ve que el cuchillo es el único medio de tomar la situación?!
-Ves ese hombre con traje en la otra esquina, ¿Sabes quién es? ¿O es que en la cárcel no os informáis de nada del mundo exterior? Es Anthony Marcuzzi, el puto nuevo presidente de EEUU, fue elegido hace una semana con una victoria aplastante sobre los demócratas.
En las otras esquinas el africano rezaba y el presidente intentaba hacer algo con su movil. De repente se para y grita.
- ¡Oh my god! ¡The coverage is over! ¡We are lost! ¡Finally Al Caeda won! ¡This is the end!
-Hey, espaguetti, ¿no ve que hay gente durmiendo?, ¿Quiere ser más respetuoso?- Dice el asesino.
Entonces el presidente de EEUU fue corriendo hacia el cuchillo, lo coge, y vuelve corriendo hacia su esquina. En el camino pisa a la anciana.
-¡AH! ¡Jesús! ¡¿Qué es este lugar y quiéns sois vosotros?! ¡¿Por qué está todo blanco?! ¡¿Donde está mi marido?! ¡¿y mi perrita Popi?! Hay señor... ¡aguanta Popi!
-Dile a la vieja que chape la boca.-Le dice el delincuente al policía.
-¿Mami, y quién es esa señora? ¿Por qué ese hombre ha cogido el cuchillo?- Tortura el niño a la madre.
-Hay que ser más educado, señora, puede tranquilizarse, nos encontramos en la misma situación- Dice el policía.
-¡Quieres callarte Nacho!- Grita la madre.
-¿Qué? ¿Cómo sabe mi nombre?- Dice el policía.
-Mon dieu, je suis en enfern.-Murmura el africano.
-Disculpe agente, mi hijo se llama Nacho.- Explica la madre.
Ahí es entonces cuando el presidente americano se levanta y se pone pegado al grifo.
-I have the water, I have the power.- Pronuncia victoriosamente.
-Mami, ¿qué ha dicho el señor?.
-No sé nada de Inglés y Cállate, te lo digo por última vez.
-Y Javito, mi nietito, mi ojito derecho, ¡No le volveré a ver!. Mi medicación...¡Mis vitaminas!.- Lamenta y llora la señora.
-¡Abuela, como no te tranquilices, me encargaré yo en persona de meterte a Popi, a Javito y a tus vitaminas en el culo.!- Grita el criminal.- Y en cuanto a ti -Dirigiéndose al presidente.- Me muero de sed.
- No, im sure the water is limited. If you come, I'll kill you- Contesta el presidente.
-Cálmate. O yo mismo me encargaré de que te pudras en prisión.-Amenaza el policía.
-Mami...
El africano se limitaba a observar.
-Oh, por el amor de Dios, ¡¿Qué te he dicho?! ¡¿QUÉ TE HE DICHO?!. ¿NO PUEDES ESTAR UN SÓLO MINUTO CALLADO? ERES UNA CARGA, ERES PESADÍSIMO Y MÁS DENSO QUE NADIE...-Chilla la madre.
-Sé que aun conservas la pipa, puedes mandar a callar a todo el mundo, empezando por las dos señoras.-Tienta el delincuente al policía.
-DIOS MÍO, NO VES QUE NADIE ESTÁ AGUSTO AQUÍ, Y TU VAS HACIENDO PREGUNTAS SOBRE TODO CUANDO SABES, SABES, QUE NO TENGO IDEA DE NADA. SI QUIERES COLABORAR, COSETE LA BOCA... Y COMO NO HAY NINGÚN HILO, PUES TE CALLAS.- Sentencia la madre.
-Shut up everyone!, I have the knife, you haven't nothing.- Grita el presidente.
-Haay, ¡y mi periquito! ¡¿Quién le dará de comer?! Y L'alqueria Blanca.. ¡¿Cómo acabará la temporada!?.
-Sí, sí que la tengo -El policía saca la pistola y se la coloca en la sien del asesino y quita el seguro.- y antes que nada pienso matarte a ti primero, te odio hijo de p...
Y una luz blanca acabó con todo.
De pronto, todo el mundo desapareció, menos el africano (y la habitación por supuesto). Qué se quedó pasmado mirando de un lado a otro. No entendía nada. Acto seguido surgió una voz omnipresente, como un coro, que decía algo, pero irreconocible para el oído humano. Poco a poco la voz se fue aclarando hasta que, al fin, escuchó lo que decía:
"Felicidades, has pasado la prueba. La habitación es tuya. No hagas mucho ruido ni la desordenes, que mañana vienen mis padres."
Y la voz desapareció.